RESUMEN:
La conciencia que se deriva del nominalismo no es ya una virtud como la prudencia, que se forma y se perfecciona por el ejercicio. Es concebida como intermediaria entre la ley y la libertad. Respecto de la ley, la conciencia es pasiva y no puede pretender formarla o modificarla; únicamente la recibe, la manifiesta a la libertad y la aplica a sus actos.
TEXTUAL:
p. 327, §.4 La conciencia no es ya una virtud como la prudencia, que se forma y se perfecciona por el ejercicio. Está en el sujeto como una facultad intermediaria entre la ley y la libertad junto con los actos que nacen de ella. La conciencia tiene propiamente la función de juez. Respecto de la ley, la conciencia es pasiva y no puede pretender formarla o modificarla; únicamente la recibe, la manifiesta a la libertad y la aplica a sus actos.
FUENTE:
PINCKAERS, Servais: Las fuentes de la moral cristiana, Ed.Eunsa, 2000 Pamplona CAPÍTULO XI LA TEOLOGÍA MORAL EN LA ÉPOCA MODERNA: LA ERA DE LOS MANUALES
FUENTE AMPLIADA:
PINCKAERS, Servais: Las fuentes de la moral cristiana Ed. Eunsa, Pamplona, 2000 (1985)
CLAVES: Conciencia > Qué es > Como un juez que aplica la ley