RESUMEN:
Al definir el concepto de derecho se podría decir que la ambigüedad surgida dela semántica del término sugiere un lado represor del derecho cuando se mira desde la perspectiva del derecho objetivo y una arista positva, permisiva cuando se mira desde la perspectiva del derecho subjetivo, por ser éste el derecho quele pertenecea cada uno. Por ello no cuestionamos el derecho subjetivo, que lo vemos como algo positivo, sino el derecho objetivo que lo percibimos como una imposición.

TEXTUAL:
Pues bien (se dirá) resuélvase la ambigüedad y todo estará en su sitio: la contradicción desaparecerá, esa cara oscura, negativa, represiva, corresponde al derecho objetivo que con sus innumerables leyes, ordenanzas, etc., obstaculiza nuestros movimientos. En cambio, la cara luminosa, positiva, es la del derecho subjetivo, aquello que me pertenece como propio y de lo que no puedo ser privado sin que me cause un daño injusto. No habría falta preguntarse por la razón o el porqué de este derecho subjetivo, puesto que está íntimamente ligado a la personalidad individual, que lo vive espontáneamente advierte su conexión con la justicia. Solamente deberíamos preguntarnos por el derecho objetivo, que aparece como una artificialidad superpuesta para cuya imposición es necesaria la intervención constructiva del gendarme. Es más, sería mejor suprimirlo directamente, como muchos proclaman hoy, sin preguntarse tantos porqués y dejando al derecho subjetivo en plena libertad para extenderse solo. Las cosas, sin embargo, no se plantean en términos tan simples o, mejor, tan simplistas. Tal vez lo unívoco de la palabra no prueba tanto una ambigüedad semántica (aunque en ocasiones suscite equívocos en el lenguaje corriente) cuanto una estrecha conexión entre las dos versiones del derecho que e dan en nuestra experiencia vital. No es casual que el gendarme que surge como símbolo de la represión, para hacer respetar una obligación o una prohibición, cambie de rostro y considerado como eficaz ayuda si interviene en nombre de la ley, para proteger a quien ha visto lesionados sus derechos. En caso de hurto, creo que bien pocos dejarían de pedir socorro al coche de la policía que pasa en esos momentos..., y no hablemos de casos más graves, como agresiones físicas.

FUENTE:
COTTA, Sergio: ¿Qué es el Derecho?, Ed.Rialp, 2000 Madrid 14

FUENTE AMPLIADA:
COTTA, Sergio: ¿Qué es el Derecho? Ed. Rialp, Madrid, 2000 (1979)