RESUMEN:
«Si las exigencias no nacen de la realidad, nacerán de algo extrínseco, es decir, la exigencia se remitirá a la voluntad de imperio de la autoridad».
TEXTUAL:
p.101
El siglo pasado el Card. Mercier reprochaba al clero de su tiempo que no predicaban el dogma, sino únicamente la moral. Esto es significativo porque no supone solamente una presencia demasiado intensa de la urgencia práctica de hacer exhortaciones en la conducta, sino que conlleva el riesgo de una sutil transformación de la moral, y de la misma predicación. En efecto, si las exigencias no nacen de la realidad, nacerán de algo extrínseco, es decir, la exigencia se remitirá a la voluntad de imperio de la autoridad y, en consecuencia, la predicación pondrá el acento en la exigencia, en los aspectos del discurso humano que están relacionados con su capacidad de mover y de ser persuasivo.
(...) Esto es señal le que, en ese discurso, la unidad de los trascendentales se ha perdido.
p.102
La urgencia de recuperar la unidad entre la verdad, el bien y la hermosura, se advierte en la necesidad de mostrar el contenido práctico, interpelante para la libertad, de las verdades teóricas de nuestra fe y de hacer atractivo el discurso y la enseñanza. (...)
p.102
(...) Es importante que las exigencias no nazcan del imperio de la voluntad, sino de la fuerza propia del verum y del bonum.
p.103
En la predicación de la fe cristiana, que es lo que nos ocupa ahora, debe brillar la luz propia de la verdad de Cristo. El asentimiento de la fe no es una aceptación ciega, es un «obsequium radonabile».
FUENTE:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum (Libro) , , Ed.Rialp, 1999 Madrid II. LA PERCEPCIÓN DE LA BELLEZA. 11. La gracia santificante como hermosura sobrenatural
FUENTE AMPLIADA:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum Ed. Rialp, Madrid, 1999 (1998)
CLAVES: Educación > Educación religiosa > Desde la unidad de los trascendentales