RESUMEN:
Los placeres que no son naturales del hombre, pueden ser placeres (1) por enfermedad, (2) por vicio, o (3) por naturaleza deforme
TEXTUAL:
VII, 5, §966. Dice pues, primero, que de los deleites unos son placenteros según la naturaleza y otros no, y unos y otros se subdividen a su vez.
De entre los que no son naturalmente deleitables, unos, llegan a serlo debido a ciertas falencias, es decir, porque sobrevengan ciertas enfermedades corporales, o también ciertos malestares propios de lo animal, por los cuales se altera la naturaleza pasando a otra disposición; otros, llegan a ser deleitables debido a una mala costumbre, que llega a ser como cierta naturaleza; y, otros, debido a una naturaleza viciosa, como algunos hombres tienen corruptas y perversas complexiones corporales. De acuerdo a lo cual se sigue que en éstos haya, tanto perversísimas aprehensiones de la imaginación, como afecciones del apetito sensible.
FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Comentario a la Ética a Nicómaco (Libro) , , Ed.EUNSA, 2001 Pamplona VII, 5, §966
FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Comentario a la Ética a Nicómaco Ed. EUNSA, Pamplona, 3000 (2000)
CLAVES: Felicidad > Placer