RESUMEN:
La felicidad es actividad continua cuyo efecto permanece en el agente
TEXTUAL:
3. A la tercera hay que decir: Como se observa en el IX Metaphys.12, la acción es doble. Una, la que procede del que obra y llega a la materia exterior, como quemar o cortar. Y una operación así no puede ser la bienaventuranza, porque esta operación no es acción y perfección del agente, sino más bien del paciente, como allí mismo se advierte. La otra es la acción que permanece en el agente, como sentir, entender y querer; y una acción así es perfección y acto del agente. Y esta operación puede ser la bienaventuranza.
FUENTE:
Suma Teologica, I-II q.3, a.2, ad.3
FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología, I-II Ed. Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1989
CLAVES: Fin último del hombre > Bienaventuranza