RESUMEN:
El saberse a sí mismo consiste en una reflexión moral. La comprensión es una modificación de la virtud del saber moral y es un saber concreto y momentáneo.
TEXTUAL:
El saberse en el que consiste la reflexión moral está de hecho referido a sí mismo de una manera muy particular. Las modificaciones que aporta Aristóteles en el contexto de su análisis de la phrónesis son buena muestra de ello. Junto a la phrónesis, la virtud de la consideración reflexiva, aparece la comprensión. La comprensión es una modificación de la virtud del saber moral. Está dada por el hecho de que en ella ya no se trata de uno mismo sino de otro. Es en consecuencia una forma de juicio moral se habla de comprensión cuando uno ha logrado desplazarse por completo en su juicio a la plena concreción de la situación en la que tiene que actuar el otro. Por lo tanto, tampoco aquí se trata de un saber en general sino de algo concreto y momentáneo. Tampoco este saber es en ningún sentido razonable un saber técnico o la aplicación del mismo. El hombre muy experimentado, el que está iniciado en toda clase de tretas y prácticas y tiene experiencia de todo lo existente, sólo alcanzará una comprensión adecuada de la actuación de otro en la medida que satisfaga también el siguiente presupuesto: que él mismo desee también lo justo, que se encuentre por lo tanto en una relación de comunidad con el otro. Esto tiene su concreción en el fenómeno del consejo en problemas de conciencia. (...). También aquí se hace claro que el hombre comprensivo no sabe ni juzga desde una situación externa y no afectada, sino desde una pertenencia específica que le une con el otro, de manera que es afectado con él y piensa con él.
Esto se hace más claro en otros tipos de reflexión moral que presenta Aristóteles: buen juicio y compasión. Buen juicio se refiere aquí a un atributo: es juicioso el que juzga recta y equitativamente. El que posee buen juicio está dispuesto a reconocer el derecho de la situación concreta del otro y por eso se inclina en general a la compasión o al perdón. Es claro que aquí no se trata tampoco de un saber técnico
FUENTE:
GADAMER, Hans-Georg: Verdad y Método, Ed.Ediciones Sígueme, 2003 Salamanca 394
FUENTE AMPLIADA:
GADAMER, Hans-Georg: Verdad y Método Ed. Ediciones Sígueme, Salamanca, 2003 (1960)
CLAVES: Interpretación > Hermenéutica