RESUMEN:
Es preferible que haya leyes a sólo jueces sabios por tres razones: 1) Porque es más facil encontrar unas pocas personas doctas capaces de hacer buenas leyes, que encontrar muchos jueces sabios; 2) Porque al hacer las leyes se estudian detenidamente viendo muchos casos, en cambio los casos siempre son de improviso y requieres una solución rápida y particular; 3)Porque como los legisladores juzgan en universal refiriéndose al futuro es más difícil que se deje guiar por el apasionamiento que suscita un caso concreto.

TEXTUAL:
Ob.2. Según se expresa el Filósofo en V Ethic.1, el juez es para los hombres como el derecho viviente. Mas el derecho viviente es mejor que el derecho sin vida de las leyes. Luego hubiera sido mejor encomendar la aplicación del derecho al arbitrio de los jueces que no formular leyes al respecto.

Ad.2. A. la segunda hay que decir: Según expone el Filósofo en I Rhetor.4, es mejor regularlo todo con la ley que dejarlo todo al arbitrio de los jueces. Y esto por tres razones. Primera, porque es más fácil encontrar las pocas personas doctas capaces de hacer buenas leyes que las muchas que se requerirían para juzgar de cada caso en particular. Segunda, porque los que hacen las leyes estudian detenidamente cada una de ellas, pero los juicios sobre singulares se refieren a casos que ocurren de improviso, y es más fácil discernir lo justo examinando muchos casos que considerando uno solo. Tercera, porque los legisladores juzgan en universal y refiriéndose al futuro, en cambio quienes presiden un tribunal juzgan sobre hechos presentes, respecto de los cuales fácilmente se dejan influir por sentimientos de amor, de odio o de cualquier otra pasión, con lo cual su juicio queda pervertido. Por consiguiente, dado que el derecho viviente del juez no abunda mucho y es demasiado elástico, era necesario determinar por medio de leyes, siempre que fuera posible, lo que se ha de considerar justo, dejando poquísimas cosas al arbitrio de los hombres.

FUENTE:
Suma de Teología I-II q.95, a.1, s.

FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología, I-II Ed. Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1989