RESUMEN:
Que la lujuria es contraria a la naturaleza puede entenderse en dos sentidos: que es contraria a la naturaleza animal por la cual el macho está referido naturalmente hacia la hembra, y en este sentido se dice que pecados como la bestialidad o la sodomía son contra natura. En otro sentido, más específicamente humano, se dice que la lujuria es contra la naturaleza humana por cuanto se usa la sexualidad fuera del orden de la razón, esto es fuera del fin natural por el que Dios hizo la sexualidad, que es la procreación y educación de los hijos.

TEXTUAL:
7. Dice Agustín en el libro VII [más bien en el libro XI, c.17] Sobre la ciudad de Dios, que todo vicio es contrario a la naturaleza. Pero la fornicación no es contraria a la naturaleza: pues sobre aquello de Romanos, I, 26: "Pues sus mismas mujeres invirtieron el uso naturaleza" dice la Glosa: "Uso natural es que duerma hombre con mujer". Luego, no es pecado.

7. A LO SÉPTIMO debe decirse que el acto de lujuria puede decirse contrario a la naturaleza de dos modos. De un modo, absoluto, es decir, porque es contrario a la naturaleza de todo animal; y de este modo, todo acto de lujuria al margen de la unión entre varón y mujer se dice que es contrario a la naturaleza, en cuanto no es proporcionado a la generación que en cualquier clase de animal se produce por la unión de ambos sexos; y a este modo se refiere la Glosa. De otro modo, se dice que algo es contrario a la naturaleza, porque es contrario a la naturaleza propia del hombre, al cual le corresponde ordenar el acto generativo a la debida crianza; y de este modo, toda fornicación es contraria a la naturaleza.

FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal (Libro) , , Ed.Eunsa, 1997 Pamplona q.15 [Sobre la lujuria], a.1 [Si todo acto de lujuria es pecado]

FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal Ed. Eunsa, Pamplona, 1997 (1268)