RESUMEN:
El mal hecho con malicia es el mal hecho por hábito. Si se considera el pecado de malicia en cuanto que procede de alguna inclinación habitual, entonces no es un género especial de pecado, sino cierta circunstancia de pecado que puede encontrarse en cualquier género de pecado.
TEXTUAL:
2. Así como se aproxima al Padre la potencia y al Hijo la sabiduría, así también al Espíritu Santo la bondad. Pero aquel que peca por debilidad, la cual se opone a la potencia, se dice que peca contra el Padre; y aquel que peca por ignorancia, la cual se opone a la sabiduría, se dice que peca contra el Hijo. Luego, aquel que peca por malicia, la cual se opone a la bondad, se dice que peca contra el Espíritu Santo.
2. A LO SEGUNDO debe decirse que según la exposición de antiguos santos, y también según la exposición magistral322, el pecado contra el Espíritu Santo puede decirse que es un género especial de pecado, pero a condición de que el pecado de malicia se considere de modo propio, es decir, en cuanto que alguien peca por haber perdido los beneficios del Espíritu Santo con los cuales se aparta del pecado. Pero si se considera el pecado de malicia en cuanto que procede de alguna inclinación habitual, de este modo no es un género especial de pecado, sino cierta circunstancia de pecado que puede encontrarse en cualquier género de pecado. Y de manera semejante debe decirse también, si el pecado contra el Espíritu Santo es una impenitencia final, según la exposición de Agustín.
FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal (Libro) , , Ed.Eunsa, 1997 Pamplona q.3 [Sobre la causa del pecado], a.14 [Si todo pecado de malicia es un pecado contra el Espíritu Santo]
FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal Ed. Eunsa, Pamplona, 1997 (1268)
CLAVES: Mal > Malicia