RESUMEN:
La envidia se pone entre los pecados capitales a pesar de ser causada por la soberbia porque aquella tiene un movimiento específico de rechazo del bien [del prójimo] que no es propio de la soberbia en sí misma considerada, ya que ésta es el afán desordenado de propia excelencia.

TEXTUAL:
5. Aquellas cosas de las cuales una surge naturalmente de otra, no pueden considerarse igualmente principales. Pero la envidia surge naturalmente de la soberbia. Luego, la envidia no debe considerarse como vicio capital al lado de la soberbia.

5. A LO QUINTO debe decirse que a partir de aquello que se ha dicho, es patente que la envidia, que hay en muchos, surge de la soberbia; pues por la soberbia el hombre se entristece principalmente por el bien de otro, porque es impeditivo de la propia excelencia. Pero debido a que la envidia tiene una razón especial en su movimiento, a saber, de modo que huye del bien [del prójimo], por esto se pone separadamente de la soberbia como vicio capital.

FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal (Libro) , , Ed.Eunsa, 1997 Pamplona q.8 [Sobre los vicios capitales], a.1 [Sobre el número de vicios capitales y cuáles son]

FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal Ed. Eunsa, Pamplona, 1997 (1268)