RESUMEN:
El conocimiento de los singulares no pertenece a la perfección de la inteligencia en el orden especulativo; sí, en cambio, por lo que se refiere al conocimiento práctico, que no se realiza sin el conocimiento de los singulares, sobre los que recae su operación, como se dice en el libro VI Ethic.. Por lo que, como dice Cicerón en su Rhetorica, la prudencia requiere "la memoria del pasado, el conocimiento del presente y la cautela para lo futuro".
TEXTUAL:
3. A la tercera hay que decir: El conocimiento de los singulares no pertenece a la perfección de la inteligencia en el orden especulativo; sí, en cambio, por lo que se refiere al conocimiento práctico, que no se realiza sin el conocimiento de los singulares, sobre los que recae su operación, como se dice en el libro VI Ethic.. Por lo que, como dice Cicerón en su Rhetorica, la prudencia requiere ?la memoria del pasado, el conocimiento del presente y la cautela para lo futuro?. En consecuencia, por haber tenido Cristo la plenitud de la prudencia, conforme al don de consejo, se sigue que conoció todos los singulares pasados, presentes y futuros.
FUENTE:
Suma Teologica, III parte q.11, a.1, ad.3
FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma Teologica III Ed. BAC, Madrid, 2002 (1223)
CLAVES: Prudencia > En qué consiste > Conocimiento de los singulares