RESUMEN:
la prudencia ayuda a todas las virtudes y actúa en todas. Esto, sin embargo, no es suficiente para negarle el carácter de virtud especial, ya que nada impide que en algún género haya una especie que de algún modo actúe en las demás especies de ese género, igual que el sol influye de alguna manera en todos los cuerpos, y es también otro cuerpo
TEXTUAL:
ob 2. Más aún: Dice también el Filósofo, en VI Ethic. 28, que la virtud moral hace obrar rectamente en orden al fin; la prudencia, en cambio, en orden a los medios. Ahora bien, en toda virtud hay que hacer cosas en orden al fin. En consecuencia, en toda virtud hay prudencia, y, por lo mismo, no es virtud especial.
ad 2. A la segunda hay que decir: De eso se deduce que la prudencia ayuda a todas las virtudes y actúa en todas. Esto, sin embargo, no es suficiente para negarle el carácter de virtud especial, ya que nada impide que en algún género haya una especie que de algún modo actúe en las demás especies de ese género, igual que el sol influye de alguna manera en todos los cuerpos.
FUENTE:
Suma de Teología II-II q.47, a.5
FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología II-II (a) Ed. BAC, Madrid, 1995 (1271)
CLAVES: Prudencia > Relación y diferencia con las virtudes morales > Presente en todas las virtudes