RESUMEN:
La expresión clásica del primer principio de la razón práctica «Bonum est faciendum et prosequendum, et malum vitandum» sería una trivialidad si se considerase como un juicio de la razón especulativa, porque es el principio de la misma tendencia, lo que la mueve
COMENTARIO:
La expresión clásica del primer principio de la razón práctica «Bonum est faciendum et prosequendum, et malum vitandum» sería una trivialidad si se considerase como un juicio de la razón especulativa, porque es el principio de la misma tendencia, lo que le mueve (el enunciado teórico, como lo acabamos de expresar, es la reflexión sobre ese principio de acción, que como tal no se puede expresar, porque ?conviene insistir es una vivencia). Esto queda de manifiesto en que para actuar no andamos continuamente diciéndonos: ?el bien se debe hacer...?, ?el mal, evitar?; ?el bien se debe hacer...?, ?el mal, evitar?. Dicho principio es un principio de acción no especulativo, es un factum, y con independen-cia de dicho factum no sería posible el juicio reflejo y teórico: ?el bien se debe hacer y el mal evitar?. Este primer principio de la razón práctica mueve a actuar, pues siempre que actuamos lo hacemos bajo la razón de bien o de mal. El primer principio de la razón prácti-ca subyace, por tanto, implícitamente a todo juicio del tipo ?p es bueno? o ?debo hacer p?, o ?p es malo?. Por lo tanto, el primer principio es, en el más estricto sentido del término, principio de la praxis, un principios del movimiento, principios de la acción. «Del primer principio no se puede ?derivar? contenido alguno. Más bien se ?muestra? por así decir en los diferentes principios específicos y desarrolla en ellos su eficacia práctica fundante, si bien no como principio de pensamiento, sino precisamente como principio de movimiento» Rhon, p.283.
FUENTE:
RHONHEIMER, Martin: La perspectiva de la moral (Libro) , , Ed.Rialp, 2000 MADRID
FUENTE AMPLIADA:
RHONHEIMER, Martin: La perspectiva de la moral Ed. Rialp, MADRID, 2000
CLAVES: Razón práctica > Primer principio de la razón práctica > Es principio de la misma acción, no del juicio sob