RESUMEN:
Sto. Tomás llama `prostitución espirtual` a la de aquél que se envanece en su virtud, porque en lugar de inclinarse hacia Dios, utiliza su aparente honestidad para que los demás se inclinen hacia él.
TEXTUAL:
Ob 3. Y también: lo honesto coincide con la virtud, según vimos (a.l). Pero hay una belleza que se opone a la virtud, tal como leemos en Ez 16,15: ?Fiándote de tu belleza, te prostituiste en tu nombre?. Luego lo honesto no es igual que lo bello.
Ad 3. A la tercera hay que decir: La objeción se basa en la belleza corporal, aunque también puede admitirse una especie de fornicación espiritual para con la belleza espiritual al enorgullecerse de la honestidad, según nos lo dice Ez 28,17: ?Ensoberbecióse tu corazón de tu hermosura y se corrompió tu sabiduría?.
FUENTE:
Suma de Teología II-II, q.145, a.2
FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología II-II (a) Ed. BAC, Madrid, 1995 (1271)
CLAVES: Soberbia > Prostitución espiritual