RESUMEN:
Entre las virtudes para llevar bien las adversidades cabe destacar en orden de `choque` las siguientes: en primer lugar la `paciencia` con la que hacemos frente al primer efecto de la adversidad, que es la tristeza; en segundo lugar, `la mansedumbre` por la que moderamos la ira que provoca la adversidad; en tercer lugar, la caridad, que suprime el odio; y por últiimo, la justicia, por la que evitamos hacer daño al causante de la adversidad.

TEXTUAL:
Se dice que la paciencia tiene una obra perfecta en la tolerancia de las adversidades, de las que se origina en primer lugar la tristeza, moderada por la paciencia; en segundo lugar, la ira, que modera la mansedumbre; en tercer lugar, el odio, suprimido por la caridad; en cuarto lugar, el daño injusto, prohibido por la justicia. Quitar lo que es origen y principio de una cosa es lo más perfecto. Pero de ahí no se sigue que, por ser en esto la paciencia más perfecta, lo sea en absoluto.

FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología II-II (a), Ed.BAC, 1995 Madrid q.136, a.2, ad.1

FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología II-II (a) Ed. BAC, Madrid, 1995 (1271)