RESUMEN:
Sto. Tomás distingue entre APETITO NATURAL, APETITO SENSITIVO, y APETITO INTELECTUAL. El primero es el apetito de todo ser hacia su fin propio, que comprende también el apetito de los graves a ir hacia abajo. El apetito sensitivo O SENSUALIDAD sigue a una determinada aprhensión de algo que se presenta como un bien para el cuerpo. El apetito intelectual o VOLUNTAD es el apetito del bien sin restricción. Y esto es así porque «LA NATURALEZA RACIONAL TIENE TANTA CAPACIDAD, QUE NO LE BASTARÍA LA INCLINACIÓN A UN OBJETO DETERMINADO, SINO QUE NECESITA DE COSAS NUMEROSAS Y DIVERSAS. Y POR ESTE MOTIVO SU INCLINACIÓN SE ORIENTA HACIA ALGO COMÚN QUE SE ENCUENTRA EN MUCHAS COSAS.»

TEXTUAL:
ÁRTICULO 1 ¿La sensualidad es una potencia cognoscitiva o sólo apetitiva?

SOLUCIÓN

§2 (...) En cambio, el apetito superior, que es la voluntad, tiende directamente a la razón misma de la apetitibilidad en absoluto, [y] así como la voluntad apetece primaria y principalmente la bondad misma, o la utilidad o algo por el estilo; en cambio, apetece esto o lo otro de manera secundaria, en cuanto es participe de la razón antedicha. Y esto porque LA NATURALEZA RACIONAL TIENE TANTA CAPACIDAD, QUE NO LE BASTARÍA LA INCLINACIÓN A UN OBJETO DETERMINADO, SINO QUE NECESITA DE COSAS NUMEROSAS Y DIVERSAS. Y POR ESTE MOTIVO SU INCLINACIÓN SE ORIENTA HACIA ALGO COMÚN QUE SE ENCUENTRA EN MUCHAS COSAS. Y así, mediante la aprehensión de lo común, tiende a la cosa apetecible en la que sabe que existe una razón de este tipo para apetecerla. En cambio, el apetito inferior de la parte sensitiva, llamado sensualidad, tiende al mismo objeto apetecible en cuanto se encuentra en él lo que constituye la razón de la apetitibilidad. PERO, [LA SENSUALIDAD] NO TIENDE A LA RAZÓN MISMA DE LA APETITIBILIDAD, PORQUE EL APETITO INFERIOR NO APETECE LA BONDAD O LA UTILIDAD O EL DELEITE [EN SÍ], SINO ESTA COSA ÚTIL O DELEITABLE; y en este aspecto el apetito sensible está por debajo del apetito racional. Pero al no tender sólo a esta o aquella cosa sino a todo lo qu es útil o deleitable para él, resulta superior al apetito natural; y por este motivo necesita también de la aprhensión, mediante la cual distingue lo deleitable de lo no deleitable. [Mayúsculas de DiegoPOOLE]

§3 (...) Por esto se comprende que el objeto del apetito natural es esta cosa en cuanto tal cosa; en cambio, el objeto del apetito sensitivo es esta cosa en cuanto conveniente o deleitable, como acontece con el agua por ser conveniente para el gusto y no por ser agua; mientras que el objeto propio de la voluntad es el mismo bien en absoluto. Y así se diferencia también [entre] la aprehensión del sentido y la del entendimiento, porque [v.gr] lo propio del sentido es captar una cosa colorada, y lo propio del entendimiento aprehender la naturaleza misma del color.

FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Opúsculos y cuestiones selectas, vol. 2 (Libro) , , Ed.BAC, 2003 Madrid Q. SOBRE LA SENSUALIDAD, Art. 1 ¿La sensualidad es una potencia cognoscitiva o sólo apetitiva? (De Veritate, q.25)

FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Opúsculos y cuestiones selectas, vol. 2 Ed. BAC, Madrid, 2003