Un gobierno puede decir que ellos han creado los nuevos límites de velocidad en las carreteras, pero no puede mantener que ellos han creado las prohibiciones de los homicidios o de los robos.

p. 127 SEDUARDUS. Ningún filósofo importante ha entendido que la ética se base en voluntades que emiten órdenes o mandatos. Si me dejas pensar unos pocos segundos… quizá Francisco Suárez (1610) sí hizo depender las leyes desde la voluntad, pero quedó muy en solitario. Antes habían publicado Juan Duns Scoto y Guillermo de Ockham en el mismo sentido. Ellos mantenían que los mandatos de Dios creab...

La Filosofía del Derecho consiste en explicar por qué el derecho genera el deber de ser obedecido.

p. 122 SEDUARDUS. Me atrevería a decir que la Filosofía del Derecho consiste en la empresa de explicar las razones por las que el derecho ‘obliga’ más allá de la compulsión, es decir, de por qué el derecho genera el deber de ser obedecido.

Los permisivistas dogmáticos

p. 106 Hay personas que dicen estar abiertas al respeto de todos porque ellas viven una ética permisiva, y compruebo que se molestan mucho cuando alguien emite una opinión que no coincide con la suya. Los que se separan de ellos tienden a ser llamados integristas, fundamentalistas o dogmáticos. Hoy está vigente una auténtica dogmática del permisivismo, al menos entre los que dicen seguir este t...

La moral no es un apósito a nuestra humanidad: es el arte de saber realizar la humanidad que ya poseemos pero que aún no hemos acabado de desarrollar.

p. 100 La moral no es un apósito a nuestra humanidad: es el arte de saber realizar la humanidad que ya poseemos pero que aún no hemos acabado de desarrollar. Tomás de Aquino utiliza también, a veces, la expresión ‘humano o moral’.

La idea moderna del "estado de naturaleza". Se toma en consideración una necesidad humana y se convierte en la "ley natural" que impulsa a la vida social (libertad, seguridad, propiedad, etc)

p. 72 SEDUARDUS. Los nuevos jusnaturalistas entendieron que si contemplaban al hombre como un ser aislado, antes de entrar en sociedad, en este estado de aislamiento podían conocer científicamente la realidad humana. Les resultó fundamental la figura del ‘estado de naturaleza’ para poder representarse a los hombres aisladamente. BELLAPERTICA. ¿Luego la figura del estado de naturaleza fue una c...

¿Te imaginas a un gobernante que no crea en la moral objetiva? Esa persona tendría necesariamente que decir: “Ciudadanos, os daré unas leyes que no tenéis el deber de obedecer, pero quien no las obedezca..."

p. 25 ¿Te imaginas a un gobernante que no crea en la moral objetiva? Esa persona tendría necesariamente que lanzar diariamente un mensaje que vendría a decir: "Ciudadanos, os daré unas leyes que no tenéis el deber de obedecer, pero quien no las obedezca..."

A comienzos del siglo XIX la idea del derecho natural era una mixtura extremadamente confusa de rastros de doctrinas anteriores sobre la ley natural: el iusnaturalismo de los derechos individuales y la doctrina clásica de la ley moral natural

SEDUARDUS. Este tema requiere conocer la historia de lo que llamaron ‘derecho natural’. Ten en cuenta que la Edad Moderna difundió una noción del derecho natural, basada en individuos solitarios que vivían en el ‘estado de naturaleza’ y que, como desean llevar vida social, celebran un contrato de todos con todos en el que crean directamente un único poder político tal como lo conocemos ahora. ...

Dios no ama todas las cosas por igual

Suma Teológica, en boca de San Agustín, en el sed contra de un artículo dedicado a examinar si "Dios ama todas las cosas por igual". Frente a los argumentos que afirmaban que sí, Santo Tomás cita al Obispo de Hipona con las siguientes palabras "Dios ama todos los seres que hizo, y de ellos ama más a las criaturas racionales, y entre ellas, más a las que son miembros de su Unigénito, y mucho más...

El fin último del hombre es un bien común

p. 49 Aristóteles define al hombre como animal social, y Santo Tomás es también rotundo cuando afirma que "el bien del individuo no es un fin último, sino que está subordinado al bien común"[1]. Ciertamente, con eso él no pretende justificar cualquier subordinación del hombre a cualquier bien común: tal y como él mismo afirma en otro lugar, el bien común es superior al bien individual siempre q...

Distinción errónea entre ley natural y derecho natural

Se tiende a pensar que la ley natural es la ley moral en general, y que el derecho natural es sólo aquella parte de la ley que se refiere a nuestras obligaciones de justicia. Así parece entenderlo por ejemplo Ana Marta González, que escribe: p. 16 Como es sabido, para el pensamiento moderno la doctrina de la ley natural se convirtió sobre todo en la pieza clave de un ordenamiento social según ...

La moda de pedir perdón por las supuestas faltas y pecados que cometen otras personas

A mí me desconcierta mucho la moda actual de pedir perdón por las supuestas faltas y pecados que cometen otras personas, asumiendo su representación, cuando a lo mejor tales personas no han cometido ningún pecado. Lo cual es tanto como declararles culpables. Y también me desconcierta el calificar como 'víctima' a cualquier denunciante sin que se haya probado agresión alguna. Qué pasaría si e...

Quintana Paz: "Por muy en el siglo XXI que nos hallemos, sigue habiendo sed de lo sagrado"

Fuente de la captura: Quintana Paz: " Entrevista al filósofo Miguel Ángel Quintana Paz Miguel Ángel Quintana Paz durante una sesión en el ISSEP por Javier Arias | 10 febrero, 2022 Entrevistas / Miguel Ángel Quintana Paz P-Usted ha afirmado que en sociedades como la española vivimos en tal situación que hay que volver a explicar qué es el cristianismo desde lo más bá...

La crisis del debate parlamentario se agrava con la "disciplina de voto"

p. 432 Si los parlamentarios se encuentran completamente vinculados a las directrices de su partido, el debate parlamentario no pasa de ser una vana escenificación, que carece de toda eficacia sobre la determinación de la voluntad surgida aparentemente del debate público. El partido que cuenta con la mayoría parlamentaria introduce en el aparente debate público su voluntad privada, con intenció...

El programa electoral realmente es un punto de partida para el debate. No puede imponerse tal cual

p. 435 (...) El programa electoral sólo puede ser la expresión de cuál será el punto de partida de esos candidatos en el debate parlamentario, si efectivamente resultan seleccionados para participar en dicho debate. Un verdadero parlamentarismo implica necesariamente que un programa electoral no pueda pasar a ser un programa de gobierno, sin sufrir modificación alguna. La forma de pensar y quer...

La crisis del debate parlamentario: suprime el diálogo, y se convierte en un mercado de intereses contrapuestos (yo te doy esto si tú... me apruebas eso)

p. 430 La actual crisis del parlamentarismo –señalada por muchos– consiste en la pérdida de la capacidad deliberativa de la institución parlamentaria, en la desaparición de las condiciones institucionales que pueden hacer del parlamento una verdadera cámara de deliberación. Con frecuencia se ha denunciado la progresiva mercantilización que ha sufrido el parlamento en la mayoría de las democraci...

Para que se dé una auténtica deliberación es preciso que respete dos límites: lo que es aceptado unánimemente por los deliberantes , y la conciencia de estar formando una misma comunidad y por la intención de preservarlas

p. 428 Para que se dé una auténtica deliberación pública es preciso, en primer lugar, que esa deliberación esté delimitada, pues, en general, una deliberación es posible si se trata de una deliberación delimitada: si todo es objeto de deliberación, la deliberación misma resulta imposible. Para constituir una auténtica deliberación colectiva, el debate público ha de mantenerse entre dos límites:...

El poder político es la facultad de decidir sobre lo público. El régimen político es el orden o articulación de esa facultad

p. 409 El poder político es la facultad de decidir sobre lo público. El régimen político es el orden o articulación de esa facultad, es la forma adoptada por una polis para la toma y determinación de la decisión sobre lo público.

La razón última y definitiva de cumplir la ley no es el acuerdo con el contenido de la ley; ni tampoco lo es el miedo a la pena previsible. La razón es el reconocimiento de que el poder es una voluntad que quiere el bien común y lo quiere en concreto.

p. 405 Propiamente hablando, no obedecemos a la ley, sino al poder, pues la obediencia se presta a alguien, a la voluntad de alguien. Al cumplir la ley, estamos necesariamente obedeciendo al poder, prestando nuestro consentimiento a la voluntad de alguien, y no sólo reconociendo la racionalidad de algo. Pero dar nuestro consentimiento a la voluntad de alguien, tiene sentido si esa voluntad quie...

Con la ley, el poder no desaparece, sino que se hace presente de manera sostenida y ordinaria, y se perfecciona, pues la ley es un acto del poder, más perfecto que la decisión excepcional y momentánea.

p. 404 Con la ley, el poder no desaparece, sino que se hace presente de manera sostenida y ordinaria, y se perfecciona, pues la ley es un acto del poder, más perfecto que la decisión excepcional y momentánea.

Lo propio de la autoridad es dar credibilidad al dictamen, lo propio del poder es dar eficacia a un querer

p. 393 Lo propio de la autoridad es dar garantía, acrecentar en calidad y valor un juicio, un dictamen o apreciación; en definitiva, lo propio de la autoridad es despertar fe. En cambio, lo específico del poder es dar eficacia a un querer, proveer de imperatividad a una decisión; en resumen: suscitar obediencia. La actuación de la autoridad consiste en la emisión de un conocimiento garantizado,...

La legitimidad consiste en el consentimiento otorgado al poder, que comporta la disposición a la obediencia, es decir, la aceptación de la capacidad de obligar del poder.

p. 391 Esencialmente, la legitimidad consiste en el consentimiento otorgado al poder, que comporta la disposición a la obediencia, es decir, la aceptación de la capacidad de obligar del poder. Esto supone el reconocimiento del poder; y este reconocimiento –reconocernos en el poder– significa una forma de identificación con el poder. Esta identificación puede llevarse a cabo a través de diversas...

La equidad como recurso a lo justo natural

Ver antes La diferencia del iusnaturalismo realista respecto al racionalista p. 372 Según esta concepción [realista], el derecho natural era objeto del conocimiento práctico; y esto significa que el conocimiento acabado y perfecto de ese derecho, es decir, su plena determinación, era necesariamente una labor prudencial. Esto se refleja en el hecho de que la epiqueya o equidad fuera entendida, ...

La diferencia del iusnaturalismo realista respecto al racionalista

p. 372 Nada de esto corresponde a la concepción clásica del derecho natural. Este iusnaturalismo [realista] nunca pretendió encontrar lo justo natural mediante una deducción a partir de un concepto abstracto de la naturaleza humana, sino que lo buscó en la realidad viva y social de los portadores de dicha naturaleza, en las mismas instituciones y en la misma praxis a través de las cuales los ho...

La doctrina de los ddhh se funda en el iusnaturalismo racionalista de los derechos naturales prepolíticos

p. 373-374 puntualización acerca de la relación entre la doctrina de los derechos humanos y el iusnaturalismo. No son pocos, ciertamente, los que, desde posturas iusnaturalistas, creen ver en los derechos humanos un reflejo y una especie de versión actualizada de la idea del derecho natural. Esta percepción puede considerarse acertada, siempre y cuando el iusnaturalismo de que se trate, sea el ...

La dignidad humana reside en la capacidad de trascender la propia individualidad o particularidad, adquiriendo así una existencia comunitaria

p. 369 La dignidad humana reside en la capacidad de trascender la propia individualidad o particularidad, adquiriendo así una existencia comunitaria, y haciéndose copartícipe de un bien común que, en cuanto tal, es bien propio de cada uno, pero superior a su bien individual. Trascender la propia individualidad es, pues, hacerse apto para que el bien común pueda ser el mejor bien propio. El dere...

La "dignidad desmedida" como fundamento de los derechos humanos: derechos ilimitados y contradictorios

p. 365 Por esto, no tiene sentido –al menos, sentido jurídico– definir derechos tomando como medida –como hace la D.U.D.H.– lo necesario para una existencia conforme a la dignidad humana, para el libre desarrollo de la personalidad, o para un nivel de vida adecuado que asegure la salud y el bienestar. Lo necesario para cumplir estas expectativas no puede servir de medida para los derechos, porq...

La esencial politicidad del derecho presupone la participación del individuos en una comunidad como presupuesto de sus derechos

p. 364 La esencial politicidad del derecho hace que no podamos hablar –en sentido estricto– de derechos humanos: de derechos –reales y concretos– que un sujeto pueda poseer en virtud, exclusivamente, de su condición humana. La naturaleza humana puede ser el fundamento de la posesión de derechos; pero no basta reconocer a alguien como ser humano, para saber qué le corresponde realmente como dere...

La concepción liberal de los derechos naturales postula derechos prepolíticos basados en la "dignidad" absoluta del ser humano. Difícilmente exigibles y contradictorios

p. 361 En el caso de los derechos humanos, la fórmula elegida no sólo no deriva inmediata y necesariamente de ese valor que es la dignidad humana, sino que tal fórmula está mediada por el pensamiento liberal, y responde a la concepción liberal de la dignidad humana, y a la concepción liberal del derecho. Que la formulación práctica de la dignidad humana pueda consistir en una enumeración concre...

Los derechos fundamentales son tales porque son aspectos especialmente relevantes del bien común político

p. 358 En el fondo, consagrar unos derechos como derechos fundamentales, situándolos fuera del alcance de la actividad política, es decir, de las decisiones acerca del bien común político, no consiste en otra cosa que en valorar especialmente unos aspectos o elementos del contenido de ese bien, haciendo de esta parte del bien común una parte fundamental y no sometible –al menos, ordinariamente–...

Los derechos no son las condiciones de nuestra perfecta individualidad, sino las condiciones de nuestra plena ciudadanía, y, como tales, son reivindicados.

p. 358 (...) Los derechos no son las condiciones de nuestra perfecta individualidad, sino las condiciones de nuestra plena ciudadanía, y, como tales, son reivindicados.

En el liberalismo, el derecho no aparece como la participación de un sujeto en el bien común, sino como el patrimonio de un individuo independiente acorazado frente a los requerimientos comunes

p. 352 El derecho está esencialmente vinculado al bien común, y la realidad de esta vinculación hace insostenible la concepción liberal del derecho. Esta concepción se caracteriza, precisamente, por la negación de ese vínculo: por entender el derecho como una dotación individual, que se encuentra desvinculada de lo común, y que ha sido inmunizada de toda influencia que proceda de exigencias del...

La pena como la parte que corresponde al delincuente en lo común

p. 351 Si el bien común es el fundamento del derecho y de su justificación, también lo es de la pena impuesta a quien actúa delictivamente. La pena es también un derecho: es lo que corresponde como propio o suyo al delincuente, aunque éste no lo reivindique. Si la ley se ordena al bien común, el castigo por incumplir la ley se ordena igualmente al bien común. La pena, en sentido estricto, no se...

La justicia es una virtud porque dar a cada uno lo suyo es la forma de realizar auténticamente un bien común en cuanto tal

p. 349 La justicia es una virtud porque dar a cada uno lo suyo es la forma de realizar auténticamente un bien común en cuanto tal. Querer un bien común es quererlo en su participabilidad por todos y cada uno de los miembros de la comunidad a la que corresponde ese bien. La justicia es una virtud porque –al igual que toda otra virtud– consiste en una cualidad o excelencia que es necesaria para l...

El bien común es el fundamento de la ley y de los derechos

p. 346 La ley y el derecho tienen su razón de ser en el bien común político. El bien común es el fundamento de la definición y de la obligatoriedad, tanto de la ley, como del derecho. Si el derecho es lo que corresponde como propio o suyo a alguien, y lo que, en consecuencia, ha de dársele, la razón de que eso sea suyo, y la razón de que los demás deban dárselo, reside en el bien común de éstos...

Crítica a la idea de que el fundamento de la propiedad privada sea el trabajo

p. 343 Todo esto nos lleva a rechazar la idea de que el origen de la propiedad es el trabajo. Esta idea –que ya se encuentra presente en algunos pensadores de la escolástica tardía– es representativa del pensamiento de Locke y, en general, de la concepción liberal de la propiedad. Según este modo de pensar, el trabajo constituye la fuente primera de la propiedad porque mediante él –como activid...

El trabajo, lejos de ser el origen y la causa de la propiedad, resulta ser, en realidad, el efecto y la consecuencia de la propiedad

p. 347 Podemos afirmar incluso que el trabajo, lejos de ser el origen y la causa de la propiedad, resulta ser, en realidad, el efecto y la consecuencia de la propiedad. El trabajo, como realidad que verdaderamente puede llamarse así, es decir, como realidad social, definida y sostenida, no precede a la propiedad, sino que es posterior a ella. Es la propiedad lo que hace posible el trabajo. Para...

Constituir y definir una sociedad es condición necesaria para la existencia del derecho y para la determinación de su medida.

p. 337 Constituir y definir una sociedad es condición necesaria para la existencia del derecho y para la determinación de su medida. En el fondo, esto no es más que otra forma de afirmar que no existen derechos individuales: que el hombre como individuo no es sujeto de derechos.

Qué significa el Estado de Derecho. No significa ordenar lo político mediante el derecho. Es una forma de poder que se autolimita constiyendo otro poder: el poder judicial

p. 334-335 Señalemos en particular que el denominado Estado de derecho no significa ordenar lo político mediante el derecho. El Estado de derecho no constituye otra cosa que un determinado orden político: un orden político que, como tal, supone una forma concreta de autolimitación del poder político. En el Estado de derecho, el poder político se autolimita constituyendo otro poder, el poder jud...

La ley o determinación política, como definición de lo común, precede a la ley jurídica como definición de lo justo,

p. 334 La ley o determinación política, como definición de lo común, precede a la ley jurídica como definición de lo justo, de lo que corresponde como derecho y del sujeto a quien corresponde. Podemos decir que lo político es condición de lo jurídico, en el sentido de que la definición del ser, de lo que somos en común, es condición de la definición del corresponder, de lo que en consecuencia e...

La forma primera y fundamental de la justicia es la justicia distributiva

La forma primera y fundamental de la justicia es la justicia distributiva. El derecho y la justicia aparecen donde lo colectivo se desglosa entre sus miembros, en la distribución de lo común; y la distribución supone la existencia de alteridad entre los destinatarios de ese reparto[Javier HERVADA, Introducción crítica al derecho natural, Eunsa, Pamplona, 1982, p. 56.]. El derecho surge cuando q...

Lo político y lo jurídico pueden distinguirse mediante la diferencia entre lo común y lo propio. Pero lo propio se define por relación a lo común.

p. 328 Es preciso establecer una clara distinción entre lo político y lo jurídico. Pero esta distinción no ha de significar una separación o independización entre esos dos ámbitos, si con esta distinción se desea facilitar la racionalidad de lo político y de lo jurídico. La racionalidad jurídica es también una racionalidad práctica. Y para que lo jurídico adquiera este tipo de racionalidad, es ...

Lo público y lo privado. La primordial publicidad del espacio político.

[Según la mentalidad liberal lo privado es lo primordial, que el trata de salvarse en la medida de lo posible al vivir en comunidad. Para el republicanismo cívico lo público es lo primordial, que se confía según los casos a los particulares para la mejor consecución del bien común] p. 292 La distinción público-privado no es una distinción específicamente liberal y moderna, como algunos piensan,...

Lo que la congregación de los regenerados había sido frente al resto de la sociedad colonial, lo representaba ahora la "nación americana" frente al resto del mundo y, especialmente, frente a Europa

Buena parte del espíritu puritano de los colonos del XVII fue secularizada y universalizada en el XVIII, y la conciencia de elección y predestinación que las congregaciones puritanas poseían, pasó a ser patrimonio de la nueva república en su totalidad. La idea de la "comunidad de los santos" fue proyectada sobre la naciente polis, y fue traducida en la "nación americana". Lo que la congregación...

La institucionalización del ideal es siempre limitada, pero por ser en acto es más perfecta que el ideal puro

p. 247 (...) , no aceptar la imperfección de los logros humanos, pretender para la historia la consecución de lo absoluto –la justicia, la libertad, la democracia...–, es el mayor impedimento de los bienes que sí se pueden alcanzar en la historia. Sólo se puede realizar y vivir un valor por medio de una forma institucional, y según ésta; y toda institucionalización es restringida y limitada. Re...

Toda idea –dice Bernard Crick– busca su institucionalización, y toda institución encarna una idea

Toda idea –dice Bernard Crick– busca su institucionalización, y toda institución encarna una idea [Bernard CRICK, In Defence of Politics, Penguin Books, 1964, p. 199.]. Pero mientras una idea no sea institucionalizable, esa idea no es una auténtica idea política.

Las instituciones actúan en la polis de manera similar a como los hábitos operan en el hombre: potencian su actividad, dan firmeza y estabilidad a su dinamismo

p. 242 Las instituciones – como señala Rafael Alvira– actúan en la polis de manera similar a como los hábitos operan en el hombre: potencian su actividad, dan firmeza y estabilidad a su dinamismo [Rafael ALVIRA, "Fundamentos del gobierno en la política, la economía y los medios de comunicación", Persona y Derecho, 12 (1985), p. 117].