RESUMEN:
Hay actos morlamente indiferentes considerados en abstracto, como por ejemplo, levantar una estaca, PERO considerados en concreto, con todas sus circunstancias, NO HAY ACTOS HUMANOS (DELIBERADOS) MORALMENTE INDIFERENTES.


TEXTUAL:


RESPUESTA

§ 2 Por tanto, si hablamos del acto moral según su especie, de esta manera, no todo acto moral es bueno o malo, sino que alguno es indiferente; puesto que el acto moral toma su especie del objeto según la ordenación hacia la razón, como se ha dicho más atrás. Cuando el objeto conviene a la razón, lo hace ser bueno por su género, como vestir al desnudo; pero si disiente de la razón, como llevarse lo ajeno, el acto es malo en su género. Además existe un cierto objeto que ni es contrario ni es conveniente a la razón, como levantar una estaca de la tierra, o algo de este tipo; y de esta manera se dice que es indiferente. Y en cuanto a esto bien dijeron los que dividieron los actos en tres partes, diciendo que algunos son buenos, algunos malos, y algunos indiferentes.

En cambio, si hablamos del acto moral según un individuo cualquier acto moral particular es necesario que sea bueno o malo por alguna circunstancia. Pues no puede suceder que se produzca un acto singular sin las circunstancias que hagan al mismo justo o injusto. Pues si cuando se hace algo cuando conviene, donde conviene, como conviene, etcétera, estamos ante un acto ordenado y bueno; pero si falta alguna de estas cosas, el acto es desordenado y malo. Y esto puede considerarse principalmente tratándose de la circunstancia del fin. Pues, en principio, lo que se hace por causa de una necesidad justa, se hace de un modo encomiable y es un acto bueno; pero lo que carece de una necesidad justa y no sirve para algo bueno, se considera superfluo, como dice Gregorio. Y las palabras superfluas son pecado, y con mayor razón los hechos; pues se dice en Mateo, XII, 36: De toda palabra superflua que hayan pronunciado los hombres habrán de dar cuenta.

(...) y por esto ningún acto humano singular es indiferente; y digo acto humano al que procede de una voluntad deliberada. Pues si existiera algún acto sin deliberación, procedente de la sola imaginación, como rascarse la barba, o alguno de este tipo, un acto de este tipo está fuera del género de las costumbres; por lo cual, no participa de bondad o maldad moral.



FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal (Libro) , , Ed.Eunsa, 1997 Pamplona q.2 [Sobre los pecados], a.5 [Si algunos actos son indiferentes], s.


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal Ed. Eunsa, Pamplona, 1997 (1268)


CLAVES: Acto humano > Actos Indiferentes moralmente