RESUMEN:
Si una circunstancia de la acción muda ésta en buena o en mala, tal circunstancia se convierte en diferencia específica, y deja por tanto de ser circunstancia. Esto es así porque lo que cambia la bondad en maldad no es circunstancia, sino diferencia específica. Por eso Sto. Tomás dice que la bondad o malicia dependen sólo del objeto, y nunca de las circunstancias.


TEXTUAL:
En cambio, un acto no recibe la especie de las circunstancias en cuanto tales, como ya se dijo (q.18 a.10 ad 2). Pero el bien y el mal son diferencias específicas del acto de la voluntad, como se dijo (a.1). Luego la bondad y la malicia de la voluntad no dependen de las circunstancias, sino sólo del objeto.


FUENTE:
Suma Teologica, I-II q.19, a.2, s.c.


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología, I-II Ed. Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1989


CLAVES: Acto humano > Objeto de la acción > Bonum rationis