RESUMEN:
La plenitud de vida en vista de la cual fue creado el hombre, es una comunión de amor, y como tal requiere la libre aceptación del hombre, y el tiempo presente es el espacio para esa decisión


TEXTUAL:
p.18 Esta situación es paradójica: por una parte reconocemos que el Amor de Dios es eficaz, que causa el bien que ama. Ahora advertimos además que, según parece, el designio creador no se cumple inmediatamente, sino que requiere proceso, tiempo. En efecto, así es. Si el designio creador del Amor divino es el hombre en su plenitud de vida, implica de suyo la propia colaboración del hombre, ya que se trata de una plenitud de comunión amorosa, y el amor supone la iniciativa personal del que ama: el amor no se impone, ha de ser aceptado y correspondido libremente. Al Amor creador, que está en su principio radical, el ser humano ha de corresponder personalmente, en una aceptación que sólo él puede dar, y en la que no puede ser substituido por nada ni por nadie. El «espacio» de esta aceptación es la vida humana, el tiempo de existencia de cada persona en este mundo, tal como la experimentamos en nuestra situación.



FUENTE:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum (Libro) , , Ed.Rialp, 1999 Madrid I. ¿QUÉ ES LA HERMOSURA?, 2 . La fundamentación de la belleza en la finalidad: ética y estética. a) La creación por el amor


FUENTE AMPLIADA:
RUIZ RETEGUI, Antonio: Pulchrum Ed. Rialp, Madrid, 1999 (1998)


CLAVES: Fin último del hombre > Libertad y fin último del hombre