RESUMEN:
La ley humana no puede prohibir todo lo que es contrario a la virtud, sino que es suficiente que prohiba lo que destruye la conviviencia social.


TEXTUAL:
Respuesta a las objeciones: 1. A la primera hay que decir: Que como se ha expuesto (1-2 c.96 a.2), la ley humana se da al pueblo en el que existen muchos miembros carentes de virtud y no ha sido instituida solamente para los virtuosos. Por eso, la ley humana no puede prohibir todo lo que es contrario a la virtud, sino que es suficiente que prohiba lo que destruya la convivencia social; mas las demás cosas las tiene como lícitas, no porque las apruebe, sino porque no las castiga. Con arreglo a esto, tiene por lícito, al no imponer por ello un castigo, que el vendedor, sin incurrir en fraude, venda una cosa en más de lo que vale o que el comprador la adquiera por menos de su valor, a no ser que la diferencia resulte excesiva; porque, en este caso, aun la ley humana obliga a la restitución, por ejemplo, si uno de los contratantes ha sido engañado en más de la mitad del precio justo 7. Pero la ley divina no deja impune nada que sea contrario a la virtud. (...)


FUENTE:
Suma de Teología II-II q.77, a.1, ad.1


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología II-II (a) Ed. BAC, Madrid, 1995 (1271)


CLAVES: Ley humana o positiva > Le incumbe reprimir todos los vicios?