RESUMEN:
La ley natural, al ser fruto de la participación de la criatura racional en la ley eterna, está sujeta a la capcidad intelectual del hombre de conocer y encarnar en su vida el designio eterno de Dios. [id tantum] Diego


COMENTARIO:
En este punto Sto. Tomás no es suficientemente claro. Es más, cuando trata de la mutabilidad de las leyes humanas las compara con la inmutabilidad de la ley natural (q.97)


FUENTE:
Suma de Teología I-II q.97


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología, I-II Ed. Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1989


CLAVES: Ley natural > Mutabilidad