RESUMEN:
La concepción moral del racionalismo presenta la ética en dos grados: unos principios, abstractos y universales, formulados en leyes generales, y después la acción concreta, singular, individualizada por sus circunstancias y su situación. La obra del saber moral racionalista consiste entonces en aplicar, tan fielmente como sea posible, los principios o leyes universales a la acción singular.


TEXTUAL:
Crítica del esquema clásico del conocimiento moral

p.88, §.3 Nuestra descripción del conocimiento moral es bastante diferente del esquema que se ha hecho clásico en los últimos siglos. Éste presenta dos grados: en primer lugar, unos principios, abstractos y universales, formulados en leyes generales; después la acción concreta, singular, individualizada por sus circunstancias y su situación. La obra del saber moral consiste entonces en aplicar, tan fielmente como sea posible, los principios o leyes universales a la acción singular.



p.88, §.5 (...) Comprendida a partir de la distinción entre lo universal y lo singular que resulta de la oposición entre la ley y la libertad, el conocimiento moral abstracto y el conocimiento concreto se separan y se hallan siempre en estado de tensión. Se deja de ver cómo los principios y la ciencia moral son fruto de una experiencia de la realidad, humana o divina, y a ella deben conducir; parecen descender del cielo de las ideas, totalmente elaborados en su forma imperativa. Tampoco se ven los recursos de luz que contiene la experiencia activa y recta. La aplicación de los principios y leyes a los actos se hace por una deducción de pura razón, en la que el sujeto permanece demasiado pasivo. El conocimiento moral pierde su dinamismo y su vida; su horizonte se reduce a fórmulas legales. No tiene ya otro movimiento que el interminable debate entre la libertad y la ley a propósito de los casos de conciencia.



FUENTE:
PINCKAERS, Servais: Las fuentes de la moral cristiana, Ed.Eunsa, 2000 Pamplona INTRODUCCIÓN, Cap. III, El carácter humano de la teología moral, 1. Distinción entre la moral y las ciencias humanas


FUENTE AMPLIADA:
PINCKAERS, Servais: Las fuentes de la moral cristiana Ed. Eunsa, Pamplona, 2000 (1985)


CLAVES: Moral > Evolución de la idea de moral > Ética racionalista