RESUMEN:
La lujuria y la gula tienen en común el deseo de placeres del tacto, cuya satisfacción es más buscada por sí misma que la satisfacción de los demás sentidos (vista, olfato, gusto, oído). En el caso del hombre los demás sentidos son percibidos como más intrumentales para el conocimiento de la verdad; y en los animales irracionales, tales sentidos son utilizados al servicio de los placeres del tacto (pues el perro que olfatea a la liebre, no se deleita en el olor, sino en el alimento que espera).


TEXTUAL:
9. La gula parece ordenarse al placer del gusto, mientras que la lujuria parece ordenarse al placer del tacto. Pero también en otros sentidos existen ciertos placeres. Luego, también deberían considerarse los vicios principales según los otros sentidos.

9. A LO NOVENO debe decirse que la lujuria y la gula atienden a la delectación del tacto. Pues no se dice goloso a alguien porque disfrute del sabor de los alimentos, sino porque los disfruta como algo deleitable al tacto, tal como dice el Filósofo en el libro III de la Ética Las delectaciones de los otros sentidos no son fines particulares: pues se refieren, o al conocimiento de la verdad, como sucede en los hombres; o a los placeres del tacto, como en otros animales, pues el perro que olfatea a la liebre, no se deleita en el olor, sino en el alimento que espera [EN, III, 19, 1118 a, 18-19]. Y por esto, de las delectaciones de otros sentidos no se toman algunos vicios capitales.


FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal (Libro) , , Ed.Eunsa, 1997 Pamplona q.8 [Sobre los vicios capitales], a.1 [Sobre el número de vicios capitales y cuáles son]


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal Ed. Eunsa, Pamplona, 1997 (1268)


CLAVES: Pecado > Pecado capital > Cuáles son