RESUMEN:
Los pecados capitales son aquellos que actúan objetivamente, en la mayoría de los casos, como causas finales de otros pecados. Que haya personas realicen un pecado con el fin de lograr otra cosa ilícita, por ejemplo, fornicar con ánimo de lucro, no nos permite decir que la AVARICIA sea más capital que la lujuria, pues tal disposición se debe más a la disposición personal del agente, que a la orientación natural de las acciones, pues de suyo la avaricia no suele ser causa de lujuria.


TEXTUAL:
4. De un pecado parece surgir otro, que se ordena al fin del primer pecado; así como cuando alguien miente para adquirir dinero, la mentira surge de la avaricia. Pero al fin de cualquier vicio pueden ordenarse cualesquiera vicios. Luego, un vicio no es más capital que otro.

4. A LO CUARTO debe decirse que por la disposición del hombre que peca, puede suceder que cualquier vicio se ordene a cualquier fin: pero según la disposición de los objetos o de los fines que tienen entre sí, algunos nacen determinadamente de otros, de los cuales también proceden con más frecuencia. Mas en la consideración moral se atiende a lo que existe de modo que se presenta en muchos, como también en la consideración natural.



FUENTE:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal (Libro) , , Ed.Eunsa, 1997 Pamplona q.8 [Sobre los vicios capitales], a.1 [Sobre el número de vicios capitales y cuáles son]


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Cuestiones disputadas sobre el mal Ed. Eunsa, Pamplona, 1997 (1268)


CLAVES: Pecado > Pecado capital > Qué son