RESUMEN:
Las virtudes sólo están naturalmente incoadas, pero no son naturales, pues lo que es dado al hombre por naturaleza es común a todos los hombres, y no se perdería por el pecado (los demonios no perdieron su naturaleza angélica por el pecado)


TEXTUAL:
A la pregunta: ¿Nos es dada la virtud por la naturaleza?

En cambio, lo que es dado al hombre por la naturaleza es común a todos los hombres y no se pierde por el pecado, pues hasta en los demonios permanecen los bienes naturales, según dice Dionisio en el capítulo 4 De div. nom.4 Pero la virtud no se da en todos los hombres, y se pierde por el pecado. Luego la virtud no es dada al hombre por la naturaleza.

S: (...)

Resulta, pues, claro que las virtudes están por naturaleza en nosotros sólo aptitudinal e incoativamente, no de modo perfecto, excepto las virtudes teológicas, que proceden totalmente de afuera.



FUENTE:
Suma Teologica, I-II q.63, a.1, sc.


FUENTE AMPLIADA:
DE AQUINO, Tomás: Suma de Teología, I-II Ed. Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1989


CLAVES: Virtud > Inclinaciones naturales y virtud